home

search

21. La biblioteca

  Mientras recorrían el lugar, Luz quedaba maravillada con cada cosa que veía, preguntaba tanto que Aliana decidió llevarla a la peque?a biblioteca de la manada.

  Dentro de ese lugar lleno de escritos Aliana saludo afectuosamente a un viejo hombre lobo encargado de los libros quien le devolvió el saludo, él era tan grande como todos los de este lugar, pero sus arrugas eran prominentes y con su cabello Te?ido de canas emanando un aura de sabiduría.

  En cuanto Zirus poso sus ojos sobre Luz exclamo - ?Dichosos mis ojos, jamás pensé vivir para ver a una Humana!

  Luz sonrió frente a el hombre, lo saludo y se presentó a sí misma, confirmando que era una humana. Los ojos de Zirus brillaban de alegría.

  - ?Cómo lo sabes? - Pregunto Aliana sorprendida.

  Zirus levanto una de sus cejas, luego inclino su cara posando su vista por sobre sus gafas. Se enderezo acomodando sus lentes, viro sus ojos en blanco y luego hablo:

  -Peque?a, olvidas que conozco cada rincón de este lugar. He leído todos los libros. Se de muchas cosas y en cuanto vi a Luz con sus ojos verdes supe que era una humana, lamentablemente la información contenida de su pueblo en nuestros libros es pobre, casi sacadas de libros de cuentos, siempre quise leer más sobre ellos, pero no encontré la oportunidad de ir a otros lugares a conseguir más información.

  Mientras hablaban de cosas triviales, Luz noto la mirada curiosa de Zirus.

  – Adelante, pregunta ?qué quieres saber? - La muchacha ya tenía claro que despertaría la curiosidad de muchos en este mundo, comenzaba a cansarse, pero a la vez estaba resignada a la curiosidad de otros. Intento ser empática ya que ella también era una preguntona curiosa, ya le tocará su turno para preguntar por cosas de los cambiaformas.

  Antes de que Zirus abriera la boca Luz soltó automáticamente un comentario- pregunta lo que sea, pero te digo desde ya que yo no poseo poderes.

  La boca de Zirus quedo entreabierta sin alcanzar a lanzar su pregunta, se notó su decepción, pero sonrió por el pensamiento que se cruzó por su mente “Se adelanto a mi pregunta, podría ser eso un poder”.

  La tarde paso casi completa en la biblioteca, uno de los temas tocados fue el cómo llego Luz a este mundo y debatieron el cómo podría salir de este. Tocaron muchos otros temas, pero fue imposible hablar en profundidad de cada uno ya que el tiempo no era suficiente.

  En pleno debate de ideas se oyó un rugido. ?GRRRRRRR!

  Luz se tapó con ambos brazos su estómago lo que no sirvió de nada por que volvió a rugir ahora más fuerte GRRRRRRR-GRRRR-GRRRR. Sus mejillas se ti?eron de rojo por la vergüenza y pidió disculpas por el sonido de sus tripas hambrientas. -Lo lamento, no puedo manejar este ruido.

  Un estallido de carcajadas salió de la boca de todos en el lugar.

  Después de secar sus lágrimas producidas de tantas risas, Zirus las insto a salir para ir a cenar.

  Ambas muchachas salieron de la biblioteca amenazando que volverían otro día para seguir conversando.

  Se fueron directamente a la cocina, Luz estaba feliz de comer en el lugar, estaba lleno de hembras Omegas preparando la cena que servirían en el casino de la casa de carga.

  El aroma era maravilloso, se sirvió una fruta y comenzó a observar las maniobras realizadas por las cocineras.

  - ?Puedo ayudar? - pregunto Luz una vez que trago su fruta.

  Serem la observo con gusto- ?Estas segura que quieres hacer la labor de una Omega?

  -Por supuesto, que problema existe en eso. El trabajo de ustedes es uno de los más importantes, mantienen nutridos a los lobos y por su puesto a mí también- Luz les hablaba mientras frotaba su barriga con una mano y mostraba una sonrisa pícara.

  Las Omegas la aplaudieron mientras ponían un delantal blanco sobre el cuerpo de Luz y la instaban a rebanar una verdura que parecía ser una zanahoria de color morado.

  Cada loba le daba consejos de como lavar, pelar y cortar los alimentos que le iban pasando. Se podía observar la cara de Luz concentrada al cortar cada rebanada de verdura.

  If you encounter this tale on Amazon, note that it's taken without the author's consent. Report it.

  Mientras la criatura mantenía su concentración puesta en la tabla de picar, las Omegas detuvieron sus movimientos y se pararon en una posición de obediencia y sumisión inclinando levemente sus cabezas cuando se dieron cuenta de que el Beta estaba parado en el dintel de la puerta con sus ojos fijos sobre el cuerpo de la criatura.

  Al sentir una mirada penetrante Luz elevo su vista encontrándose de lleno con los ojos negros dominantes del Beta. Este al ser pillado en el acto, desvió su mirada y sin decir ni una palabra se retiró. Luego de eso todas retomaron sus actividades en la cocina.

  Achicando un ojo y frunciendo su nariz Luz le pregunto a Aliana - ?Quién es ese?

  - ?Quién, Xioma? él es el Beta, el segundo al mando de la manada y mejor amigo de mi hermano.

  <> Pensó Luz para sí misma. Sin darle mayor importancia, siguió trabajando y entrometiéndose en la vida ajena de cada loba para pasar un rato ameno.

  Las Omegas invitaron a comer a las chicas dentro de la cocina, mientras algunas comenzaban a servir los alimentos en el casino de la casa de carga. Serem quiso agradecer a la dulce humana y como premio le dio un peque?o trozo de miel, Luz podía ver las celdillas hexagonales de cera del panal con su miel en el interior.

  La muchacha se lo hecho a la boca y mastico con gusto, es una porción muy peque?a para su gusto, pero de todas formas lo agradeció. Mientras lo comía, sentía como perdía el sabor a miel quedando finalmente la cera del panal el cual masticó y moldeo como si fuera una goma de mascar poco elástica hasta formar con su lengua una bolita de cera que saco desde su boca. Durante el proceso Serem le explicaba como obtenían la Miel. Quedo sorprendida del como la conseguían, realmente fue un verdadero honor para ella ser recompensada con un trocito de esta dulce miel.

  ---------------------------------------------------------------------------------

  Por otro lado, Xioma fue en busca de Cas, lo encontró en su sala absorto en papeles y mapas para trazar las diferentes estrategias que presentaría a sus aleados en la busqueda de derrotar a las fuerzas enemigas.

  -Al fin conocí a la Luna- con estas palabras Xioma saco a Cas de su concentración -la vi ayudando en la cocina, parecía estar entretenida. Debo reconocer que es una mujer hermosa- esta última frase la dejo solo en su mente para evitar la ira del Alfa ya que los Lobos suelen ser extremadamente posesivos con sus parejas.

  Con cara de sorpresa Cas escucho el relato de Xioma, se había refugiado en la sala llenando su mente de planes estratégicos para liberar un poco su mente de la hermosa mujer que le temía. El impulso por ir a verla fue irresistible y sin darse cuenta dejo a su amigo hablando solo mientras movía sus pies en dirección a la cocina. No quiso asustarla por lo que se asomó lentamente mientras veía a esta hermosa criatura sentada riendo y hablando mientras se servía la cena dentro de la cocina.

  Luz que estaba comiendo despreocupada nuevamente se sintió observada, pero era una energía distinta, dio un vistazo a la puerta abierta de la cocina para ver solo una parte del cuerpo de un Hombre que evidentemente estaba escondido. Su curiosidad la impulso a levantarse e ir hacia la puerta, a cada paso que daba comenzó a sentir su pulso acelerado y un aroma embriagador que no lograba definir, al llegar a la puerta pudo ver a la distancia la espalda de un hombre fornido que se alejaba, sintió en su corazón que era el Alfa. Confundida pensó << ?Es temor o emoción? mi corazón casi sale de mi pecho>>.

  Intento calmarse, retomo su cena y la amena conversación con las lobas.

  Al terminar su día, dio las buenas noches a Aliana y al guardia de turno y antes de ingresar a su habitación le hizo prometer a la loba que irían a cabalgar ma?ana.

  Ya en el interior Luz comenzó a repasar en su mente todos los acontecimientos vividos en sus días en la manada, esperaba ansiosa el regreso a casa, pero entendía que debería ser paciente. Un recuerdo incomodo la hizo ruborizarse, toco sus labios al recordar su primer beso, luego frunció el ce?o molesta por ser robado por aquel hombre.

  Realizo su rutina previa a acostarse, luego apago las luces y se recostó sobre la cama con un camisón ligero de color blanco. Jamás tuvo problemas para dormir, por lo que cerro sus ojos y rápidamente se quedó dormida.

  Como siempre, a pesar de los momentos trágicos de su pasado, sus sue?os siempre incluían pasajes alegres de su vida. Poco a poco sus sue?os se fueron transformando, dando paso a una oscuridad total, ella estaba de pie dentro de lo que parecía una basta llanura de oscuridad, extra?amente no sintió miedo, agito su mano y apareció una flama blanca en la palma de su mano derecha, esto no la quemo y permitía tener al menos la visión de sus pies y brazos. Camino lo que pareció ser una eternidad hasta llegar frente a una inmensa puerta negra de bordes rojos, ella podía percibir que se escapaban peque?os rallos de luz por debajo de la puerta ?Que habrá del otro lado? Murmuro.

  Una vos tenebrosa a la distancia se escuchó: “Luz, ven a mí”. Un frio aterrador recorrió desde su espalda a todo su cuerpo erizando cada uno de sus vellos. El terror la invadió y corrió a toda velocidad en sentido contrario de la voz que la perseguía, corrió lo más rápido que pudo hasta tropezar y caer de rodillas con sus ojos serrados. Cuando abrió sus ojos se encontró nuevamente con una escena sacada de película, cientos de guerreros luchando contra las fuerzas de la oscuridad, entre ellos vio a un lobo familiar y a su lado un apuesto hombre de facciones exquisitamente varoniles, de cabello plateado tomado en una cola baja y orejas puntiagudas, tenía un aura de majestuosidad mientras empu?aba una gran espada que manejaba en forma experta frente al enemigo, Luz quien siempre fue un espectador fuera de la escena sangrienta vio como este ser majestuoso giro su cabeza en dirección a ella encontrando sus ojos dorados mirando directamente a los de ella, de sus labios salió la palabra “Liki” , no como pregunta, más bien fue una afirmación frente a su cara sorprendida.

  Luz despertó agitada, sentía una opresión en su pecho, no era dolor sin no tristeza, su camisón estaba empapado de sudor y no lograba controlar sus emociones, mientras se tomaba el pecho se repetía a sí misma “tranquila, tranquila, fue solo otro mal sue?o).

Recommended Popular Novels